17 marzo, 2014
"Sin ella, sin tu musa, no eres nadie, poeta."
por el precipicio más grande
con los ojos cerrados,
a pies juntillas
y esas ganas de besarte cada mañana.
Chillo tu nombre,
y créeme cuando te digo:
se dibuja en mi cara
la sonrisa más sincera.
Dejo de tener miedo a las alturas
y hago el acto más valiente
después de aquel en donde
por primera vez,
te besé.
Y grito,
grito de nuevo tu nombre con fuerzas.
Quizás suene suicida
pero qué mas da
si al final del abismo estás tú.
Me has matado.
Sí, a esa chica triste
que escribía cosas tristes
en sitios tristes con gente triste.
Y es que ahora solo sueño,
sueños en los que estas tú,
mi cama y no sé qué del amor.
Cariño,
te prometo que algún día
soñaremos en la misma almohada.
Puede que haya perdido,
un poco pero solo un poco,
algo de mi sur y parte de tu norte.
Tú ya sabes...
Porque... qué no sabes ya de mí.
Has creado el puzzle
y suena estúpido pero...
creo ser parte de él.
Y tú, mi pieza favorita.
Tan solo déjame juntar
tus piezas sueltas
y así,
devolverte el favor:
Recompones cada pedazo perdido de este corazón.
14 marzo, 2014
16 febrero, 2014
y vienes tú
y sonríes.
Sé que es de verdad. Ya no sólo por el tamborileo de mis pies, de mi corazón, de mis dedos inquietos escribiéndote que en unos minutos la ciudad entera se girará y nos mirará besarnos, envidiando mi suerte. No, lo digo porque mis noches son cada vez más largas si al estirar mi mano, no te encuentro al otro lado de mi cama y sienta que no hay mayor vacío que ese. Y lo vuelvo a decir porque mis días son preciosos, joder, si sé que te tengo a mi lado. Que no existe adversidad que ose intentar derribarnos pues no hay mayor desastre que saber que jamás podré compensarte todo lo que haces.
Empaparía mis sábanas de ti si con ello sintieras que fueran las tuyas. Te abrazaría tan fuerte por las noches que no dejaría que ni una sola de tus respiraciones dejara de acariciar mis labios. Que el tiempo pasase en esos instantes tan lentos como los segundos en los que aguardo en tu espera. Que haría de tu despertador mis besos y de desayuno, hacerte el amor con mermelada. Darte el primer y último beso de cada día ha empezado a ser uno de los deseos más preciados de aquella lista inmensa que un día comenzamos a escribir y en la que yo, no he podido resistirme a seguir añadiendo planes.
Porque envidio el aire que se cuela entre tus dientes, te roza la lengua y te llena de vida mientras te ríes. No sabes cuánto daría por enseñarte que tengo todo preparado para hacerte feliz.
Y es que esto es solo una pequeñísima parte de todo lo que pienso cuando me sonríes, me miras a los ojos y me dices todo lo que callas en esos silencios que me encantan casi tanto como tú.
30 enero, 2014
Solo me sale mirarte...
Porque no hace falta más que besarnos para parar el mundo, que hablarte con la mirada es suficiente para saber que tengo alquilado tu pecho por el resto de mis días. Porque sin entender por qué sabes cuando te necesito y estás ahí, siempre. Por ser tú, siempre tú, la que confía en mí cuando yo he dejado de hacerlo.
Por dejarme escalar la montaña más alta, tu espalda, y coronarla desde lo alto con mis besos. Y es entonces, desde ahí arriba, donde puedo rozar el cielo con la punta de los dedos y creer que todos mis sueños son posibles a tu lado. Y me dejo caer, me deslizo por tu nariz dejando la marca de mis labios en ella y recorro tus comisuras como si el tiempo se parara en ello. Pero termino anclada a los barrotes de tu clavícula, en la prisión de tu cuerpo. Créeme cuando te digo que me quedaría a vivir para siempre en ella.
Porque me pierdo cuando te encuentro y te encuentro cuando me pierdo... porque sabes que mi sentido de la orientación es nulo, aunque mis latidos no hagan más que contar cada centímetro que se separa tu casa de la mía. Tus labios de los míos, tus manos de las mías. Sabes que te quedas con un trocito de mí cuando te vas y no es malo, sé que no lo es. Lo cuidas mejor de lo que yo lo haría.
A veces, no me basta con cerrar los ojos para verte pero sí basta una noche sin ti para escribirte... y hoy, es una de ellas.
Quizás estas no sean razones suficientes para contestar cuando me preguntan el porqué, pero a veces me pasa, que tengo tanto que decirte que solo me sale mirarte.
26 enero, 2014
Vivo en un sueño del que no quiero despertar
"No crees que es lógico que me obsesiones, pintar en tu cara sonrisas la mayor de mis pasiones es"
"Estaré allí cuando llores y cuando rías. En tus días de melancolía y en tus alegrías. Estaré allí cuando duermas y cuando sueñes, en tus miedos más profundos y en tus noches más frías."
"Tan solo déjame escribirte, retratarte, rescatarte de la nada siempre que te sientas triste. Tan solo con mirarte cada madrugada TU AROMA IMPULSA MI PLUMA, sientes mi peso hasta en tu almohada."
12 enero, 2014
06 enero, 2014
Iré coleccionando cada parte de ti para hacerlas tan mías como tuyas y haré de la lírica un puente entre tus pensamientos y los míos. Esbozaré tantas líneas como quieras a lo largo de tu espalda con la yema de mis dedos y me emborracharé por sobredosis de ti. Te drogaré con la sustancia más buscada de todas, que no se compra con dinero ni sencillamente se encuentra.
Me acaricias el cuello y tocas mi alma. Respiras en él y me abandono a ti y me quedo a la deriva de tus besos quebrados. Me abrazas y el mundo pierde su nombre. Llego, y te beso cada trozo de piel que quedó frío sin mi aliento. Y pintar, pintar cada mañana tus caderas de sabor a madrugada.
Porque solo deseas dormir en mi boca y yo que sueñes dormida a mi lado.
Quiero construir un castillo donde cuidarte y colocar con cariño, cada ladrillo. Formar parte de tus alegrías y celebrarlas contigo cada día, así como levantarte hasta lo más alto cuando caigas. Y Cuidarte, siempre cuidarte.
Relocos y recuerdos: Sin embargo.
03 enero, 2014
Carta para un bichito
Tienes el don de con solo un abrazo poder recomponer y unir todas las piezas que una vez fueron rotas. Una a una las vas juntando, minuciosamente, de la misma manera que me besas sabiendo que esa podría ser la última vez que mis labios tocaran los tuyos. Pero sabes que no dejaré que tus clavículas se hallen tan lejos de las mías... Porque tengo un plan: encadenaré mis dedos a tu cintura y secuestraré parte de ella con los dientes. No hay distancia que esté lejos y eso lo sabemos muy bien: somos capaces de ralentizar los segundos estando a solas.
Eres la droga más dulce y sana que ha conocido cualquier mortal, los mismos que viven un infinito invierno mientras nosotras vivimos el típico verano que todo el mundo desea saborear.
Mi reflejo en tus ojos es la estampa más bonita que me puedes regalar, después de verte durmiendo en mi cama tras despertarme. En mis brazos crearé el mejor refugio para ti.
Que si tú saltas, yo salto.
Que si te encanto y me encantas... ¿Qué problema hay?
El único que puede haber es el tiempo, cariño, siempre tan egoísta.
Pero déjame encargarme de eso... Haré que cada instante sea irrepetible, que se te encoja el estómago y sientas las tan famosas mariposas...
"Y es que quiero conjugar contigo todos los verbos que acaben en arte"