01 agosto, 2011

I'm a dreamer


El viento sopla con fuerza, embravecido. Pero estoy allí, en aquel acantilado donde muchos nos han dicho adiós. El mar está furioso, azota cada vez con más fuerza sin dejarnos apenas descanso. Aún así sigo al frente del cañón, sin miedo a nada, dejando que la brisa dance libremente entre mis cabellos mientras me fundo con el medio. Suena el mar alentador y mis pensamientos pasan a tener un segundo plano. Comienzo a tener la sensación que puedo hacer lo que me proponga, que no hay miedos. No hay límites. Abro los brazos… y cierro los ojos, en un intento de conseguir sentir la más mínima sensación de bienestar. Y lo consigo. Grito con todas mis fuerzas, chillo al viento mientras éste hace remolinos entre mis largas pestañas haciéndome sonreír, creando en mí emociones más vivas que nunca. Puedo sentir la más mínima gota de agua entre las yemas de mis dedos, oler ese inconfundible aroma, e incluso, saborear el salitre a través de mis labios. Soy libre. Me siento libre. Nada me puede detener, por lo que hoy cogeré más fuerzas que nunca para perseguir sueños. Sueños escondidos, apresurados, infantiles, fantasías imposibles.

2 comentarios:

  1. Candiiii :) aquí la que te dijo: escribe algo sobre libertad. BRILLANTE! me encanta :D

    ResponderEliminar
  2. Es que me lo dijistes y me puse manos a la obra! Me encanta que te encante :D

    ResponderEliminar