12 agosto, 2011

Mucho antes de lo que imaginamos


Pasé por aquel sitio, por aquella playa. Aquella que fue testigo de caricias, besos,  promesas aún sin cumplir y juegos prohibidos bajo aquella luna que nos miraba cada noche con más ternura, y quizás con más picardía. Cada atardecer nuevo que compartíamos lo hacías tan nuestro e intenso como fugaz, tal que vivíamos mil años en escasas horas. Llegábamos hasta lo más inverosímil de tu ser, recorríamos toda nuestra anatomía y me quedaba tiempo para enamorarme más y más de tí. Sabor a mar, a salitre, a ganas de quererte, similar al que me dejabas en los labios cuando me besabas. Mi cabello cobrizo hacía ondas en el viento, asemejándose a un saludo celestial que te cubría la cara mientras me abrazas por el dorso, y entretanto me dejabas claro con tu besuqueo que no querías perderme. Las gaviotas nos hacían señales y nos indicaban el camino de vuelta a El País de Nunca Jamás: querían que nos perdiésemos como Peter y Wendy para crear la historia que ellos nunca tuvieron, aunque la nuestra haya empezado mucho antes de lo que imaginamos. La brisa nos descolocaba, sin dejarnos tregua. Manifestándose, urgiendo y susurrándonos que esto debía ser eterno.
¿Por qué te fuiste? Hoy no estás, ni lo estarás mañana.
Juro que me encantaría tenerte aquí presente, escoltándote hasta llegar a una salita que te tengo preparada en mi corazón. Házme caricias al alma y cuídala por mí cuando yo no pueda.

08 agosto, 2011

Mis tesoros

Hace 365 días elaboré un sueño, creé ilusiones, rompí esquemas. Empecé una etapa que jamás podré cerrarla, una etapa que ya forma parte de mi ser y de mi bienestar. Comencé este blog con mucho amor y con interminables ganas de mostrar mis sentimientos al más puro estilo empalagoso. Desde ese momento empecé a escribir y me di cuenta que era algo con lo que seguiría el resto de mi vida y que era necesidad seguir con ello. Muchas entradas publicadas, pero millones en borradores... y una amiga que me suplica cada vez que le enseño una que la publique. Pero son mis tesoros, algunos con incalculable valor para mí y que hay veces que prefiero disfrutarlas en solitario. ¿Egoísmo? Puede. Pero seguro que si vosotros tenéis algo que queréis mucho... ¿a que no queréis que le pase nada? Pues yo me siento exactamente igual. Son mis pequeñas riquezas. :)

¡Prometo ponerme manos a la obra en breve para seguir publicando más entradas!
Es más, si queréis que escriba un texto sobre algo en concreto... ¡no os cortéis! Estaré encantada de escribirla :D Sólo pido que escribáis un comentario debajo pidiendo lo que queréis. Millones de gracias por haberme brindado la oportunidad de seguir con esto y de tener más de nueve mil visitas... ¡porque se agradecen! Yo sólo espero que pueda recompensároslas con entradas :D